En la Biblia, específicamente en el Evangelio de Juan 15:15, se encuentra una declaración impactante que trasciende las barreras del tiempo y el espacio: “Ya no os llamo siervos sino amigos”. Esta frase, pronunciada por Jesús a sus discípulos, encierra en sí misma un profundo cambio en la relación entre Dios y la humanidad, marcando un punto de inflexión en la historia espiritual de la humanidad.
Anuncios